El enigma de Gaspar Hauser de Werner Herzog (1974)

"Eso no es posible, el espacio solo mide un par de pasos"

Película estrenada en el año 1974 en la República Federal Alemana, escrita y dirigida por Werner Herzog con Bruno Schleinstein en el papel protagonista. Fue galardonada con el gran premio del jurado del Festival de Cannes, así como el premio al mejor montaje y diseño de producción de los premios del cine alemán.

Inspirada en el personaje de Kaspar Hauser, un caso que revolucionó a la sociedad alemana de principios del siglo XIX. Kaspar apareció en Nüremberg cuando tenía 16 años, pero con un desarrollo mental equivalente al de un niño de tres años. Kaspar se había pasado toda su infancia encerrado sin ningún tipo de contacto humano.

Si hablamos de Werner Herzog, inevitablemente tenemos que hablar del nuevo cine alemán. Con la consolidación económica de la Alemania occidental, el sentimiento de culpa por las atrocidades del Holocausto fue diluyéndose. Durante esa época la industria del cine nacional realizaba películas heimat, es decir, historias que abordaban los asuntos de la vida alemana al tiempo que reforzaban los sentimientos nacionales. Como respuesta a este sentimiento de optimismo, un grupo de jóvenes artistas de izquierdas consolidaron un cine nacional critico que se conocería con el nombre de nuevo cine alemán. Alexander Kluge, Jean-Marie Straub, Danielle Huillet, Werner Herzog, Rainer Werner Fassbinder, Margarethe Von Trotta, Volker Schlöndorff, Win Wnders, Helma Sanders-Brahms, Hans Jurgen Syberberg y Edgat Reitz; son alguno de los nombres de este nuevo cine. Los cuales realizaban películas sobre un mundo de imágenes falsas y emociones reales, fracasos públicos y fantasías privadas. Uno de los que mejor plasmo la idea del nuevo cine alemán fue Fassbinder, quien reconoció que lo ideal es hacer unas películas tan hermosas como las estadounidenses, pero con una temática propia. Wenders dijo que el cine antisemita y nacionalista de la época nazi acabó con el cine alemán. Ningún director de los años setenta podía encontrar inspiración en las películas de aquellos años, de ahí que miraran hacia afuera, a Estados Unidos, en lo que habría de constituir uno de los intercambios mas enriquecedores de la historia del cine. Por su parte, Helma Sanders-Brahms, al igual que Von Trotta y Helke Sander, presentaba la realidad de las mujeres en la compleja y convulsa historia de su país.

Sin embargo, Werner Herzog optó por dejar de lado los temas que abordaban sus paisanos y, en cierta medida, a la misma Alemania. Desde el primer momento mostró más interés por los paisajes y los sueños románticos que por los estudios. A los 18 años, influido por la poesía romántica alemana y la idea de lo sublime, atravesó Sudán sufriendo todo tipo de infortunios. Herzog, a diferencia de Sanders-Brahms, no tenía ningún interés en plasmar situaciones cotidianas sobre gente anónima. De hecho, su filmografía era el reflejo de su propia vida, muy alejada de una existencia aburguesada en Alemania, en medio de montañas y desiertos donde sentir al límite y mirar a la muerte cara a cara. Después de John Ford es el paisajista más importante de la historia del cine. 

El enigma de Gaspar Hauser es un buen ejemplo de todos estos intereses que Herzog desarrolló a lo largo de su vida. Un film pausado que refleja el ritmo de vida propio del rural del siglo XIX. Muestra una imagen en gran medida influida por los paisajes de la pintura flamenca, así como por la pintura romántica alemana. Para la música Herzog empleó diferentes compositores del Renacimiento, Barroco y Clasicismo. En la película, Kaspar Hauser, por su desconocimiento de verdades establecidas, viene a cuestionar desde las funciones del lenguaje hasta el papel de la mujer en la sociedad. Kaspar encarna la contemplación crítica del mundo. Pero esta película no es solamente el reflejo de Kaspar Hauser, también lo es del actor que lo interpreta, Bruno Schleinstein.

Bruno Schleinstein, también conocido como Bruno S. Nacido en el año 1932 fue el hijo no deseado de una prostituta. Pasó casi toda su infancia y adolescencia en instituciones psiquiátricas donde sufrió todo tipo de maltratos. Prácticamente marginado de la sociedad demostró un talento innato para la música. En 1970 Bruno S. apareció en un documental "Bruno der Schwarze - Es blies ein Jäger wohl in sein Horn", cuando Werner Herzog lo vio decidió que debía protagonizar su próxima película, El enigma de Garpar Hauser.